El maquillaje que te favorece.

  

Hoy vamos a hablar de maquillaje. ¿Sabes qué matices resaltan tus rasgos? No son los mismos si eres rubia, castaña o morena. En Estudio de Estética Sylvie Gardet te ayudamos a encontrar la paleta que mejor te va en función del tono de tu piel, ojos y pelo.

 

CASTAÑA: Si tienes la piel melocotón, pelo castaño, castaño claro o rubio dorado y ojos claros, azules, verdes o grises (como Olivia Palermo, Kate Middelton o Blanca Suárez).

Te favorecen: los colores suaves, melocotón, marfil, verdosos y azul bebé; los matices dorados y amarillentos (mantequilla, marrón dorado) y más ácidos, turquesa, naranja, coral y aguamarina.

Olvídate de: los tonos oscuros y apagados, como negro y gris, parecerás cansada.

Tu look: tu maquillaje de día incluye una mirada limpia, pestañas destacadas y labios en tonos rosas, desde el pálido hasta ácidos y fucsia. Puedes dar mayor expresividad a tus cejas aplicando un toque de sombra pero sin dejarlas muy agresivas. Si tienes rojeces, corrígelas evitando maquillajes rosados. Tu maquillaje de noche apuesta por dar fuerza a la mirada. Tu producto estrella es el eyeliner o el lápiz marrón oscuro, negro o azul marino con sombras en marrón oscuro, gris o naranjas y, para no restarle protagonismo, unos labios jugosos con toques de gloss en rosas suaves. Base de maquillaje en beige o dorado, sin tono bronceado, únicamente un poco de rubor muy ligero en la misma gama de los labios. Tus uñas: coral, rojos y rosas claros, naranjas, verdes, azul cielo y turquesa.

RUBIA: Si tienes la piel porcelana, rosada,  pelo rubio y ojos muy claros, casi siempre en diferentes tonos de azul (como Claudia Schiffer, Blake Lively o Patricia Conde)

Te favorecen: los colores pálidos-pastel, los matices suaves y empolvados, especialmente los rosas, malvas y el agua marina. Blanco roto, lavanda, frambuesa y gris, así como los matices fríos y azulados de todos los colores.

Olvídate de: los colores terrosos y anaranjados.

Tu look: tu maquillaje de día potencia tu piel, con un maquillaje en tonos beige (nunca rosados) y toques dorados en el rostro. Sombras muy ligeras en marrón claro o pastel y pestañas casi desnudas. Los labios en rosas suaves, jugosos e hidratados. También los tonos fríos y todos los tonos con matiz azul. Tu maquillaje de noche dará protagonismo total a la mirada. Ojos ahumados en marrones o berenjena mezclados con toques dorados, con lápiz negro dentro del ojo y pestañas muy marcadas. Los labios en tonos nude, beige rosado o colores nacarados. Tus uñas: rojo oscuro, rosa palo, malva y azul índigo.

PELIRROJA o CASTAÑA ROJIZA: Si tienes la piel dorada, con o sin pecas, ojos marrones o verdosos y pelo pelirrojo o castaño rojizo (como Julia Roberts, Julianne Moore o Christina Hendricks).

Te favorecen: los colores de la tierra, beige, camel, marrón, ocre, caqui, ladrillo, teja, bronce y chocolate.

Olvídate de: los tonos pasteles, colores extremos, como el blanco y el negro.

Tu look: tu maquillaje de día destaca unos labios en tonos marrones, granates o vino, con texturas muy opacas y cubrientes y acabado mate. Una mirada limpia y aniñada, con sombras color hueso y pestañas destacadas. También algunos toques de lápiz marrón claro para conseguir más expresión. Tu maquillaje de noche apuesta por los ojos ahumados con sombras en tonos grisáceos, visón, verde militar y caqui para potenciar tu color natural. No uses sombras rojizas o anaranjadas pues acentúan la sensación de irritación o cansancio. Aplica máscara de pestañas negra y también puedes delinear por dentro del ojo con un lápiz verde oscuro o negro. Para los labios, unos toques de gloss con pigmentos rojizos para crear una sensación de labios mordidos y frescos. Tus uñas: frambuesa, azul noche, violetas, verdes.

MORENA: Si tienes el pelo y ojos oscuros y la piel mate o todo lo contrario, muy blanca (como Penélope Cruz, Inés Sastre o Eugenia Silva).

Te favorecen: los colores intensos, rojo, rosa, azul, negro. También claros: amarillo y blanco.

Olvídate de: naranjas y dorados.

Tu look, si tienes la piel mate: tu maquillaje de día debe equilibrar el tono cetrino o amarillento (matiz dorado) y corregir e iluminar las ojeras. Colorete coral, anaranjado o rosado, para dar “cara de salud” y los labios en rojo luminoso o coral nacarado. Los ojos marcados con eyeliner. Tu maquillaje de noche debe hacer énfasis en sienes y arco de las cejas. Enmarca los ojos con sombras en tonos tierra, dorados o bronces, con lápiz azul oscuro, marrón muy oscuro o negro. Tus uñas: porcelana, corales y naranjas, granates.

Tu look, si tienes la piel muy clara: tu maquillaje de día debe potenciar tu tez blanca haciéndola más evidente con una base de maquillaje beige en el mismo tono de la piel. Rubor anaranjado, coral o melocotón, para suavizar el contraste entre la piel y los ojos y pelo oscuros. Potencia tu mirada con máscara de pestañas y mancha los labios en rojo muy transparente. Tu maquillaje de noche potenciará los ojos con un ligero ahumado en grises, verdes, azules o violetas, sin caer en lo gótico y mucha máscara de pestañas. Rubor casi imperceptible y serán los labios rojos-naranja granate o burdeos mate los que te den mucha luz. Tus uñas: tierra, rosa chicle y lavanda.

Como puedes ver, las técnicas de maquillaje van mucho más allá de ponerse rímel y colorete y dominarlas sólo se consigue a base de paciencia y práctica. Aplicar correctamente la base de maquillaje, el corrector, el iluminador, lograr unos intensos ojos ahumados, acertar con el color de labios… son los elementos que realmente definen un maquillaje profesional.

En Estudio de Estética Sylvie Gardet te brindamos la oportunidad de conocer todos estos secretos. Apúntate a nuestros talleres de automaquillaje y aprenderás las nociones básicas de los diferentes tipos de maquillajes, muchos trucos y a dar con los tonos y estilos que más te favorecen. ¡Todo un reto!